Para garantizar una buena conservación de nuestras prendas, te aconsejamos:
✔ Lava a una temperatura máxima de 30°C.
✔ No uses lejía ni blanqueadores.
✔ No retuerzas la prenda al escurrir.
✔ Para prendas delicadas, lava a mano con suavidad.
✔ No uses secadora.
✔ Gira las prendas al lavarlas.
Siguiendo estos cuidados, conservarás la textura y el diseño de tu prenda por más tiempo.